Monday, December 19, 2005

La generación del whatever

Quisiera que esa frase fuese mia, pero no lo es... se la debo a mi hermano mayor, una de las personas mas inteligentes que conozco. Creo que al llegar primero, se llevó la inteligencia que se iba a repartir entre nosotros tres... el del medio se llevó el don de la palabra, y yo me he de contentar con la belleza (en otras palabras, y para decirlo en buen dominicano, me jodién, pues bien raro que soy).

En fin, comentaba con una amiga, que vive en los USA (que por cierto USAn al resto del mundo para limpiarse el trasero... ¡ya entendi!) como ahora nos toca sufrir con la generación actual, la del whatever según mi hermano... Para los que no hablan inglés, whatever es una expresión que se podría traducir como "lo que sea", o mas bien como "que mas me da", o en buen dominicano "me importa un coño".

Se caracterizan los honorables miembros de esta generación, por un total desentendimiento de todo lo que no esté directamente delante de sus narices. Y a veces ni de lo que tienen en frente se interesan. Para mi, nacido en el 66, y que pasé la adolescencia en los 80's post-Balaguer y aun con las consignas del "millón para la UASD" y los ecos de "7 dias con el Pueblo", las canciones de Silvio y Pablo, y "las casas de cartón" de Los Guaraguos, frescas en mi cabeza, me resulta difícil de comprender estas posturas.

Y tengo claro de que ni yo, ni mi generación les damos por los tobillos a quienes se chuparon a Trujillo, o a Balaguer en los 12 años... Que por cierto, recuerdo perfectamente como pasé por comunista, trance que me duró como tres días, hasta que, en una discusión pendeja (ni me acuerdo por que era) le voceé con un tono que haría orgulloso al mismo Lenin "maldito burgués" a un compañero de colegio, hijo de prestigiosa familia, que para mi desgracia, si sabía lo que le estaba queriendo decir... y haciendo gala del hecho de que él habia practicado cuanto deporte rudo se podia practicar en aquella época, y de que iba al gimnasio a "darle a los jierros" (cuando yo ni sabía donde había uno), por poco me parte en cuatro pedazos... pero me desvío del tema...

No entiendo que valores estamos los padres, directa o indirectamente, inculcando a nuestros hijos (tengo uno de 6 años, que a veces me hace desear que fuera un poco menos pensante). Veo con horror, si, es una palabra cursi, como no se les enseña el respeto a la autoridad, ni a las normas de convivencia, ni a nada... ¿que pensamos? Por ejemplo, no entiendo como se le entrega a un carajito de 16 años un carro de alta cilindrada (yo me pasé la adolescencia y temprana adultez en carro público, quizás por eso no lo entiendo), para que se pasen las noches andando por nuestras calles cual Fdo. Alonso criollo, a riesgo de joderle la vida a cualquier pendejo (léase, yo) que no anda en esas pendejadas... Vivo en una esquina bien movida en santo Domingo, y me toca ver varios accidentes al mes... una vez un chamaquito de esos enyipetados, borracho como un HdelagranP, desbarató y casi mata a dos empleados de un casino, al comerse un semáforo en rojo... Un señor argentino que vió el choque (y por poco forma parte de él), al llegar un hermano algo mayor del cabroncito borracho, le dijo a este que su "hermanito" era un asesino por manejar en esas condiciones y de esa manera... ¡Este prestigioso ciudadano se ofendió! ¡Pero que cojones!

¿O será que simplemente me estoy poniendo viejo, y al Alzeimer no me permite recordar que yo era, tanto o mas vacío que estos pendejos que ahora me desconciertan?

2 comments:

balamia said...

lo peor es que esta generación de la que hablas, es nada más y nada menos que hijos de la gente que se escondía de balaguer en los doce años para que no los mataran... hijos de padres que, en su momento, vieron a sus padres torturados por trujillo.
Yo pienso que no estamos ante ninguna generación diferente... los imbéciles e indolentes siempre han estado ahí. Los conformistas, los air head, son los más.
Lo que pasa es que nosotros los reconocemos... reconocemos la diferencia abismal entre su mundo y el nuestro.
El reto está en lograr que nuestros hijos también sean diferentes a los de su generación. Enseñarlos a leer libros... que Narcisazo y Orlando Martínez no son los protagonistas de un cuento... que hay formas de comunicación más antiguas que el internet... que las cosas cuestan... y tú, saber afrontar el hecho de que tu hijo va a ser un raro igual que tú. Yo siempre he sido la rara del grupo y nada me llena más de orgullo que mis hijos también lo sean algún día.

kpops said...

Para aquellos nacidos en la generación del "Whatever" tenemos que aceptarlo,es alarmante la cantidad de jóvenes indiferentes a la relidad social que vivimos en nuestro país. Al escuchar las historias de mi papá y mis tíos, su etapa comunista y su preocupación por las situaciones que vivían (que te digo, fueron perseguidos en la UASD por comunistas, ya puedes saber), siempre me he preguntado, seré yo capaz algún día de hacer algo así?? No sé si es por pendejismo o simplemente por no ver la razón clara; pero la verda es que sí, entiendo tu punto, y es que es más fácil para muchos sólo el vivir por vivir y pasar el buen rato, que buscar un significado a lo que estamos haciendo.