En una conversación por otro lado, discutíamos sobre lo que pasaría con el tema de este enema fiscal que se nos avecina, a lo que yo dije inicialmente lo siguiente:
Lamento desilusionarte, pero la verdad es como sigue: Vendrán las revisiones, las vistas públicas, le bajarán el impuesto al gofio, nos lo meterán frío, duraremos un par de semanas con el grito al cielo, es posible que se quemen entre 15 y 30 gomas, entre 1 y 3 muertos, menos de 220 heridos y mas de 400 detenidos a nivel nacional.
ENTOOOOONCES, vendrá la final de la pelota invernal, y como por arte de magia, seremos felices de nuevo.
Sencillo y predecible.
#SomosDemasiadoComemierdas
La respuesta de mi interlocutor indicaba (masomenos) que las cosas seguían como iban por el "postivismo" (con sarcasmo, por supuesto) de ciudadanos como yo, que damos todo por perdido.
Ese comentario me puso a pensar, y decidí responder lo siguiente:
El "positivismo" mío viene de la experiencia; lamentablemente, los hombres dominicanos o perecieron en la revolución, o los compró Balaguer o los mató Balaguer.
Somos una nación miope. Somos una nación a la que todo el mundo - incluyéndonos nosotros mismos - nos hemos pasado lustros, siglos repitiéndonos que somos brutos, que somos irrespetuosos de la ley, que somos atrasados, y lo hemos llegado a creer.
No hemos podido superar esa mentalidad de pueblerinos, esta cultura de rompe_ojos, en la que adquirimos cosas porque llegamos "a cierto nivel", o simplemente porque todos lo tienen ¿cuanta gente compra un iPad para jugar AngryBirds o entrar a Facebook?
Somos tan atrasados, que no nos damos cuenta de que tenemos el poder en nuestras manos. por un lado, tememos a los políticos cuando son ellos quienes nos deberían temer a nosotros.
Somos ta atrasados, que sabiendo que un candidato representa una mejor opción, votamos por uno que sabemos que tarde temprano nos va a joder porque estamos convencidos de que el mejor "no va a ganar", como si se tratara de una apuesta hípica.
Mucho criticar, con argumentos morales raídos a los políticos corruptos, cuando en realidad sentimos envidia por no tener el descaro, los cojones o la oportunidad de hacer lo mismo.
Somos tan pequeños socialmente hablando, que nos damos el lujo de pagar 350 pesos por un café de mierda en uno de los bistros de moda, solo para que nos vean.
Somos una nación de viejas de barrio, que llenamos nuestra miseria con lamentos.
Somos tan ridículamente cortos de visión, que nos atrevemos a exigir el 4%, al mismo tiempo que tiramos basura a la calle.
Somos tan imbéciles, que seguimos culpando al estado de la falta de valores, cuando ignoramos que los valores se perdieron primero al senos de nuestros propios hogares.
Fuimos nosotros mismos que votamos por ellos... ¿se nos olvida que el 98.16% de los votantes votó por mantener el status quo? ¡¡¡NOVENTA Y OCHO PUNTO DIECISÉIS PORCIENTO!!! ¡CARAJO! ¡aceptemos como adultos que el culpable no es Leonel, somos todos nosotros coño! ¡que somos todos los que dejamos que las cosas sigan igual!
¿positivismo? (con sarcasmo) no. Realismo. Perdí la capacidad de creer en nosotros. Como dije, nos pasaremos lo que queda del año hablando y proponiendo, teorizando en las esquinas como siempre. Pero a mí, mi fría no me la quita nadie.
Sigue siendo "positivista"... solo te advierto, mientras mas tiempo dures siéndolo, mas duro será tu despertar.
